domingo

un signo inesperado


el cielo se ilumina,
las antiguas voces retumban y se extinguen,

(desaparecen en el viento)
la luz aumenta de un modo imperceptible,
se alteran los preceptos del orden instaurado, inamovible,
que había establecido la hora de aquella tarde determinada.

como un signo inesperado,

una señal detenida en el eje de los siglos,
regreso al mar imaginario de mi infancia

a las sombras de la luna en las noches de diciembre,
a las luciérnagas,
al sol colándose entre las hojas de los árboles,
a las flores silvestres ,
al primer atardecer de primavera,
a una brisa fresca con olor a lluvia y a jazmines.

entonces, él me mira -cautivo de la ausencia-

levanta su pulgar y me sonríe.

31 comentarios:

  1. hermosa tu poesía me encantó te invito a mi blog te espero

    ResponderEliminar
  2. Que bueno eso, "cautivo de la ausencia" guauuu!!

    Besos, poetiza!

    ResponderEliminar
  3. Con los ojos de la infancia (inocencia) y sin los filtros que adquirimos en el transcurrir de la vida cuando crecemos (convencionalismos, rutinas varias, temores, etc.) se ven las cosas mejor y más claras.

    Luz y sonrisas... buen presagio.

    Besos.

    ResponderEliminar
  4. - Ana, que linda esa sonrisa, es la sonrisa de dos almas que se encuentran. Besos querida Ana. Ade

    ResponderEliminar
  5. Las últimas dos frases constituyen por sí solas un poema que lo pintan a la perfección. Me emocionan tus palabras, Anín. Te amo como siempre... y siento que en algún lugar, eso que sentiste en el mar imaginario de tu infancia, está pasando ahora mismo...
    Te quiero!

    ResponderEliminar
  6. Precioso tu poema... es el signo mismo de tus caricias escritas con tu alma..

    un bello poema


    saludos fraternos

    un abrazo inmenso

    ResponderEliminar
  7. Entonces vos, Ana, supiste reconocer los signos...


    Te dejo un beso!

    ResponderEliminar
  8. El hombre de tus días burló ese injusto cautiverio (padre de la luz no podía someterse a la tiniebla), y entonces aprobó tu encuentro sublime y absoluto porque aprendió en los cielos que a todo amor, como tu amor, tarde o temprano le gana el corazón el mar.
    Un abrazo enorme, Ana querida, de tu amigo el REL

    ResponderEliminar
  9. ¿Ese sí soy yo?
    Jaja

    Precioso bonita, vos sos una niña eterna

    Besos de mar

    ResponderEliminar
  10. inesperados signos llenos de poesía en el eje de los siglos, una sonrisa y
    MIL BESOS

    ResponderEliminar
  11. Yo también extraño a ese mar imaginario de la infancia:
    a las sombras de la luna en las noches de diciembre,
    a las luciérnagas,
    al sol colándose entre las hojas de los árboles,
    a las flores silvestres ,
    al primer atardecer de primavera,
    a una brisa fresca con olor a lluvia y a jazmines.
    Qué belleza! como no extrañar eso?
    Un beso

    ResponderEliminar
  12. Hola, hermosa. Princesa de un Reino de Palabras. Lamento la ausencia (he estado más liado que la pata de un romano). Pero ya he vuelto. Me alegra hacer este viaje juntos.
    Mil besos.
    Y escribe. Escribe, escribe, escribe, escribe...

    ResponderEliminar
  13. Pues sí que es inesperado. No se levantó nada más.
    Cuando volví de Buenos Aires comenzaba el otoño.

    Me ha encantado el texto.

    Besos con azúcar glasé.

    ResponderEliminar
  14. La vida en sí es un signo inesperado...

    Me gusta la primavera que nos pintas, la lluvia, absolutamente todo. Me quedo a vivir en tus versos...

    un beso ana

    ResponderEliminar
  15. me elevé a la imaginacion de la cual me invitó tu bella poesia... muy lindo de verdad...

    ResponderEliminar
  16. Es precioso!, todavía estoy atontada con tanta belleza...

    Un beso grande linda!

    ResponderEliminar
  17. todo retumba en la cabeza, quisiera una señal, sólo una, pero no más recuerdos, no sé de los reales y los ficticios.

    este es el post que más me a tocado el corazoncito, mojo mis ojitos.
    hermoso post
    un beso para usted y gracias por las letras.

    ResponderEliminar
  18. La vida tiene esa trampa, cuando uno vive en su infancia no se percata jamás que está viviendo su mejor momento en la vida. Lo vemos solo cuando crecemos. Tarde. Sin embargo aquellos que vivieron una infancia feliz poseen un gran tesoro para el resto de su vida.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  19. "una sonrisa me sorprende
    en este frió Otoñal"


    Como te descuides, no es lo único que levanta....


    Saludos!

    ResponderEliminar
  20. Precioso, tu escirbir me ha llevado al océano de la infancia.
    Me ha encantado.

    Besos

    ResponderEliminar
  21. Dulce, encantador, tierno y destilando magia. Gracias!

    ResponderEliminar
  22. Hey, Ani! Necesitaba un poco de poesía... de la mejor, de la tuya. Es que estuve rendiendo un concurso en la universidad y me llevó mucha energía... Qué bueno lo tuyo, che.
    Saludis

    ResponderEliminar
  23. Anita: te quiero, no olvides cuánto necesito de este lugarcito...

    ResponderEliminar
  24. Hola, Ana!
    Tengo algo para vos en mi casaZigurat!

    Un beso!

    ResponderEliminar
  25. Anónimo es Pauli. Ya lo sabías, pero igual lo aclaro. Te quiero!

    ResponderEliminar
  26. Siempre la infancia ¿verdad?. Hay veces que me veo ahí contigo. Cuando era niña sentía esa presencia... ¿eras tú?
    Besos, todos los posibles preciosa.

    ResponderEliminar
  27. Maravilla de poema mi amada amiga que tu corazón vea en tu alma la perfecsión...besos amada

    ResponderEliminar
  28. Oh esas apariciones tan esenciales...!!!

    Te abrazo, amiga.

    ResponderEliminar